viernes, 16 de septiembre de 2016

Hagamos fotografía...!

Hola Hola!!

Si, lo sé.. Me ves el pelo de San Juan a  Corpus y encima cada vez que me lo ves te repito que intentaré publicar más a menudo y al final nada... No tengo remedio! Pero bueno, no hay mal que por bien no venga y este pedazo de descanso me sirvió para recabar mas ideas para el blog, que prometo llevar a cabo!

Como dije en el post anterior voy a empezar a profundizar más en mi querido mundo, así que hoy veremos qué factores tenemos que tener en cuenta para sacar una buena foto en modo manual. Si conoces mi blog gracias al blog de Frikymama, ya tienes que saber de que hablo por que cuando estuve colaborando con Ana hice varias entradas relacionadas, de modo que para que no se haga muy tedioso para ti (tanto si leíste los post como si no) y para que el señor google no me penalice, voy a resumir brevemente en dos entradas los tres pilares principales. 

Pongámonos en situación, tenemos una cámara réflex nueva de esa marca que nos gusta tanto o que tras consultarlo muchos hemos decidido que es la que se adecua a nuestras necesidades, tenemos muchísimas ideas creativas, increíbles, innovadoras... Cogemos la cámara y sacamos la primera foto, !Qué calidad de imagen¡ !Esta si que si¡, venga va.. vamos a animarnos a usar el modo manual que hay que amortizar el dinero invertido. Pero, ¿Qué significan todos estos números? ¿Por donde empezar? Pues empecemos por el principio, lo primero de todo es empezar a hacernos amigos del modo manual aunque lo odiemos nada mas conocerlo, te aseguro que a la larga no sabremos vivir sin él. En cuanto a los numeritos que te aparecen en la pantalla, hoy entenderemos para qué sirven y cual es su significado.    

El Diafragma

Lo primero que tenemos que conocer es el diafragma, qué es, para qué sirve y cómo se representa. Una de las cosas mas importantes en la fotografía es la medición de la luz, la cual se mide a través de diferentes factores y uno de ellos es el diafragma, que mide la cantidad de luz que entra. Imaginemos lo siguiente, tenemos 32 anillos y cada uno de ellos es un poco más pequeño que el anterior. Si utilizáramos esos anillos para medir la luz, cuanto menos pongamos más luz obtendríamos y viceversa, no? Pues esto es lo que sucede con el diafragma, a menor numero de diafragma más luz obtendremos. Ahora solo nos queda saber cómo se representa todo esto que acabamos de ver en nuestra cámara. Esto esta reflejado por números enteros y decimales, siguiendo normalmente la serie de " 1, 1.4, 2, 2.5, 4, 5.6, 8, 11, 16,22,32 "  Siendo el 1,4 el la obturación más abierta y el 32 la más cerrada. Como todo, esto no es una regla inquebrantable y esta serie no siempre es así, ya que existen cámaras y objetivos (los diafragmas suelen ser determinados por el objetivo, mas que por la cámara) que permiten un mayor abanico de posibilidades. 

La Velocidad de Obturación

Una vez conocemos el diafragma, pasaremos a conocer a uno de sus acompañantes, la velocidad de obturación. Poco a poco iremos aprendiendo a coordinar unos criterios con otros, y es que si el diafragma se encargaba de medir la cantidad de luz que entra en la cámara por medio de la obturación, la velocidad es la encargada de medir la cantidad de luz que entra en la cámara por medio de la exposición. Dicho de otra forma, medir el tiempo que se va a tardar en hacer la foto, también llamado "tiempo de exposición". La velocidad se representa por números enteros y fracciones, es decir, si queremos hacer una foto a una velocidad mas o menos moderada pondremos 1/100, que significaría 100 partes de un segundo. Si por el contrario queremos hacer una foto con una larga exposición, utilizaremos los números enteros, que serán los segundos. 

De una manera un poco mas concisa, si queremos sacar fotos a alguien o algo en movimiento, tendríamos que utilizar una velocidad superior a 1/100, pero si lo que queremos es sacar las típicas fotos del mar con "efecto seda" tendremos que bajar la velocidad a menos de 2", y de ese modo conseguiremos reflejar el movimiento de las olas en la foto, y cuando hablamos de velocidades lentas podemos hablar de minutos e incluso horas, no sólo de segundos. 

Por otro lado, hay que tener en cuenta que cuanto mayor sea la velocidad en que se hace la foto, menos luz entrará en la cámara por lo que tendremos que compensar esa pérdida de luz abriendo un poco más el diafragma. Y al contrario, cuando necesitemos hacer una foto de varios segundos pero no queramos obtener tanta luz, optaremos por cerrar más el diafragma. 



Aquí te traigo un par de fotos mías en las que estoy segurísima que lo entenderás y todo este rollo que te acabo de soltar te parecerá pan comido.




Como puedes ver esta es una foto muy sencilla en la que los elementos no se encuentran en movimiento, por lo que a una velocidad de 1/100 más o menos nos resultará bastante cómoda y fácil de hacer.



Seguramente ya habrás adivinado los datos de esta foto, aunque te puedo asegurar que no es tan rápida como parece. En apenas 1/800 la hice, pero al encontrarme yo acostada en la arena parece  que la chica (quien por cierto es mi prima) salta más alto.


Y por último te traigo esta foto que por como habrás podido adivinar tiene varios segundos de exposición, para poder captar el movimiento (o mejor dicho las luces) de los coches. Para hacerla utilicé unos 15", abrí todo lo que pude el diafragma y subí un poco la sensibilidad, algo que explicaré en una prontísima entrada para no saturarte hoy con tanta información, vale? 

Espero que hayas sacado algo en claro de todo este lío que te acabo de explicar y, lo más importante, que lo practiques cuanto antes!! Nos vemos dentro de poco para conocer qué es la sensibilidad ISO, mientras tanto no dudes en contar conmigo para cualquier cosa, como siempre digo, !Cuéntamelo¡